Big Data: una mina de oro para crear nuevos productos ¿lo utilizas?

6 de mayo de 2020

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La revolución digital ha marcado un antes y un después
en todo lo relacionado con los negocios y el mundo empresarial. Nunca antes se
había tenido acceso a un volumen de datos tan inabarcable como hoy.
Recopilarlos y analizarlos correctamente abre un enorme abanico de
posibilidades de negocio. Por eso, aprovechar todo lo que el big data ofrece
puede marcar el éxito o el fracaso de tu aventura empresarial.

Diseñando
productos de futuro

No es un secreto: la información es poder. En el caso
de los negocios, el big data hoy
en día es imprescindible para tomar decisiones estratégicas y de marketing
con rapidez, para agilizar transacciones comerciales y para ganar en
competitividad. ¿Solo eso? Evidentemente, no. Hay mucho más.

Los consumidores son cada vez más exigentes y manejan
más datos. También tienen gustos cambiantes a los que hay que anticiparse y
satisfacer
llegado el momento. Adecuar la actividad empresarial, así como
los productos y servicios que se ofrecen, es casi una cuestión de
supervivencia. Y en ese proceso de adaptación el big data es una herramienta
fundamental.

La información obtenida y almacenada, siempre y cuando
se analice y valore correctamente, puede dar la clave en la adecuación de
viejos productos o en el diseño de otros nuevos
. El big data permite
establecer patrones de comportamiento de consumidores para diseñar una oferta
que dé respuesta a sus demandas.

Con los datos que se pueden obtener, las pruebas de
ensayo-error en el diseño y creación de nuevos productos y servicios pasaron
casi a la historia. Hoy el big data nos permite conocer qué es lo que el
consumidor busca
para ofrecérselo. Y eso, en un mercado tan competitivo
como el actual, es lo que puede marcar la diferencia.

Ejemplos de aplicación de big data a la creación de
productos hay miles. Uno que todos conocemos: plataformas de series o
películas online
que adaptan y personalizan sus propuestas. ¿Cómo?
Utilizando modelos predictivos en base a los datos que aporta el historial de
visitas de cada espectador.

Es solo una posibilidad, pero hoy en día, compañías de
todo tipo aplican big data para crear productos y servicios más atractivos. ¿De
dónde se obtienen los datos? No solo de lo que se consigue en la comunicación
directa o comercial con clientes o consumidores. Redes sociales, respuestas a
campañas de marketing o encuestas también aportan información de enorme valor
para adaptarse a los patrones de consumo

¿Cómo
sacar el máximo partido a la información?

Tener ingentes cantidades de datos es de gran valor,
pero solo si se saben cruzar e interpretar correctamente. Por ello, lo
primero y más básico si hablamos de big data es contar con un software que
permita almacenar toda la información
obtenida
, actualizarla y tratarla
adecuadamente. Esa será la estrategia básica para una correcta interpretación
que nos indique el camino que debemos seguir.

El segundo paso, por tanto, es seleccionar la
información realmente útil
y ponerla al servicio del diseño del producto.
¿Cómo? Descubriendo el comportamiento de los consumidores, planteando objetivos
realistas para diseñar un producto atractivo, estableciendo estrategias de
mercado adecuadas y, finalmente, poniendo en valor ese producto y servicio,
para lo que también es esencial el big data.

La tecnología ha permitido que dispongamos de
información muy valiosa en milésimas de segundo. Y esa información se puede
utilizar también para sacar al mercado productos y servicios que hagan
que nuestra empresa no solo sea más competitiva, sino también más eficiente.
Por tanto, hacer un buen uso de todo lo que el big data nos proporciona no es
un capricho, en un mercado globalizado como el actual es una necesidad.

Big Data: una mina de oro para crear nuevos productos ¿lo utilizas?